“Si no estás ocupado naciendo, estas ocupado comprando.”

Todas las empleadas de boutiques ordinarias son obligadas a usar vestidos y a maquillarse como si estuvieran en los años 40s. En la moda como en todo, el capitalismo sólo puede retroceder – no tiene a donde ir – está muerto.

El futuro es nuestro.

La vida es tan aburrida que no hay nada por hacer además de gastar nuestro sueldo en la última falda o camisa.

Hermanos y hermanas, ¿cuáles son sus auténticos deseos?

¿Sentarse en un establecimiento, la mirada distante, vacía, aburrida, bebiendo un café insípido? O quizá VOLARLO POR LOS AIRES o PRENDERLE FUEGO. Lo único que puede hacerse con las modernas casas de esclavitud – llamadas boutiques- es DESTROZARLAS. No pueden reformarse las ganancias del capitalismo ni su inhumanidad. Solo queda patear hasta que se rompa.

Revolución.

The Angry Brigade

1° de Mayo de 1971